El martes se hizo público que el sistema de pagos del Estado ya había dado entrada a este nuevo abono para los pensionados del sistema. El bono, como medida de protección social, ha experimentado un aumento frente al mes anterior: llegó a Bs 9.950, lo que representa una mejora en bolívares respecto a los Bs 7.800 del mes previo. Sin embargo, en dólares la diferencia se reduce por la depreciación del bolívar.
Por otra parte, el IVSS informó que los pensionados reciben ese mismo día el pago de la pensión junto al primer mes de aguinaldo. Aunque el monto de la pensión es muy bajo en términos absolutos, la conjunción de estos dos ingresos representa un alivio necesario en un país que mantiene elevados niveles de inflación y presión sobre el poder adquisitivo.
El pago se realiza a través de la plataforma Sistema Patria, mecanismo centralizado de los beneficios sociales del Estado, lo que permite mayor rapidez en la asignación. Además, la recomendación del organismo estatal es que los beneficiarios utilicen la banca electrónica para recibir y movilizar esos recursos con más comodidad y seguridad.
Esta medida tiene lugar en un contexto en el que la inflación venezolana sigue siendo una de las más altas de la región y donde el valor real de los ingresos fijos se reduce día tras día. El bono especial y el aguinaldo son instrumentos de soporte, pero muchos analistas coinciden en que siguen resultando insuficientes para cubrir la canasta básica de alimentos, los servicios y otros gastos esenciales.
Para los pensionados, es clave verificar en la plataforma “Protección Social” del sistema Patria que el bono haya sido asignado y aceptado, recibir el mensaje de texto correspondiente y luego revisar el monedero digital para ver el saldo acreditado. Desde allí pueden transferir a su cuenta bancaria o usar los recursos según sus necesidades.
En resumen, este 22 de octubre es una fecha importante para los pensionados en Venezuela: la pensión, el aguinaldo y el bono convergen en un solo pago. Si bien la ayuda es oportuna, la realidad económica obliga a reconocer que el camino para alcanzar un ingreso que cubra mínimamente las necesidades básicas sigue siendo largo.