El movimiento se dio en un contexto de escasa volatilidad internacional, con los inversionistas pendientes de los próximos anuncios de política monetaria de la Reserva Federal. La falta de datos económicos relevantes desde Estados Unidos dejó a los operadores sin nuevas pistas sobre el futuro de las tasas, lo que llevó a varios agentes a mantener posiciones defensivas.
A nivel local, el peso chileno aprovechó la debilidad global del dólar y el leve repunte del cobre para ganar algo de terreno. La paridad se movió durante el día entre $961 y $969, mostrando un rango estrecho y sin grandes sobresaltos.
Expertos señalan que, en ausencia de noticias que cambien el escenario externo, el tipo de cambio podría mantenerse en niveles similares durante la semana. Sin embargo, cualquier sorpresa desde la economía estadounidense o un cambio en la cotización del cobre podría alterar el equilibrio actual.
El dólar observado del Banco Central, utilizado como referencia oficial para contratos y operaciones financieras en Chile, se mantiene en valores similares, reflejando que el ajuste de hoy responde principalmente a movimientos intradía del mercado.
Por ahora, el mercado cambiario chileno vive un respiro. Pero la calma podría ser temporal: los inversionistas locales ya preparan sus estrategias ante un posible giro de la Fed en los próximos días, movimiento que podría definir la tendencia del dólar en el corto plazo.
Conclusión:
El dólar cierra la jornada en Chile con una leve baja hasta los $962, en medio de un ambiente de prudencia global y expectativa por las próximas decisiones de la Reserva Federal. Por ahora, el peso chileno se beneficia de la debilidad del billete verde, aunque el escenario sigue abierto a cambios según la evolución de los mercados internacionales.