En un entorno donde las grandes tecnológicas y los valores de crecimiento dominan los titulares, el estudio de Morningstar apunta hacia otro lado: las acciones pequeñas, con fundamentos sólidos y precios castigados. Son compañías que, pese a tener un perfil más conservador o tradicional, podrían beneficiarse si el mercado busca valor en la segunda mitad del año.
El informe revela que las acciones “small value” son las más infravaloradas, mientras que los sectores más sobrevalorados son servicios financieros y consumo defensivo. En cambio, las empresas de comunicación —que incluyen medios, plataformas digitales y telecomunicaciones— aparecen con descuentos llamativos frente a su valor razonable.
Dentro del listado destacan nombres conocidos como Alphabet (GOOGL), Microsoft (MSFT), ExxonMobil (XOM), Comcast (CMCSA), Moderna (MRNA), Kraft Heinz (KHC) y U.S. Bancorp (USB). También hay compañías industriales y energéticas que podrían beneficiarse de un repunte del ciclo económico global. Todas comparten un punto en común: según el modelo de valoración de Morningstar, su precio de mercado no refleja todo su potencial.
Eso sí, estar “barata” no siempre es sinónimo de oportunidad inmediata. Algunas de estas acciones enfrentan desafíos operativos o incertidumbre en sus resultados. Por eso, la clave está en analizar cada caso: entender su negocio, su posición competitiva y su capacidad de generar flujo de caja a largo plazo.
Para los inversionistas latinoamericanos, esta visión también es útil. En mercados como México, Brasil o Chile, hay empresas sólidas que han quedado rezagadas por factores coyunturales o por la volatilidad política, pero que mantienen buenos fundamentos. El principio es el mismo: buscar valor donde otros no están mirando.
En definitiva, el reporte de Morningstar deja una lección clara: aun cuando los mercados parecen caros, siempre hay oportunidades escondidas. Lo importante es saber identificarlas antes que el resto y mantener una estrategia paciente y bien informada.